Nuray: nuestra nueva amiga
El pasado jueves, 13 de febrero, el alumnado de 1º de Educación Infantil disfrutó de una jornada de lo más especial. Tuvieron la oportunidad de disfrutar de Nuray, una entrañable perrita que pertenece a uno de nuestros alumnos. Juntos compartimos un mañana maravillosa en la que Nuray fue nuestra protagonista del día. Ha sido una experiencia sin duda inolvidable para todos nosotros.No podemos dejar de fijarnos en las caritas de los niños cuando han entrado en contacto con Nuray.
Entre los tres y los cuatro años es el momento de comenzar a trabajar el concepto de responsabilidad en niños y niñas. En esta primera etapa de desarrollo existe una mayor predisposición a adquirir hábitos, emociones y valores y una mascota ayuda en el proceso de madurez de los más pequeños, a los que les transmite el valor de adquirir un compromiso.
El tiempo de ocio con una mascota también se enriquece, ya que la mayoría de los niños que tienen un perro en casa prefieren jugar con ellos antes de que encender la televisión, el ordenador o ponerse a jugar con un videojuego, favoreciendo así una vida más activa y saludable. Con una mascota, los niños tienen la oportunidad de relacionarse, jugar de forma activa, conectar y educar otro ser vivo. Desde luego, crecer junto a un animal aporta múltiples ventajas a su desarrollo.